viernes, noviembre 26, 2010

Thinking VI

No sé con qué moral me quejo de las cursilerías...
Si cuando lees mi blog te puede dar un coma diabético.

Victoria B.

Ahí fue cuando me acordé de tí.

Había menos dos grados afuera cuando salí. Caminé atravesando una grama solida. Era una capa verde que brillaba con el reflejo de las luces, es aquella grama que veo blanca algunas mañanas, pero esta vez, a la luz de la luna.

Observé el carro, helado por doquier, aquello que era morado, ahora lo veía blanco. Posé mi mano en él y mis huellas no quedaron marcadas en el vidrio. Seguí mi camino sin rumbo alguno, seguí moviéndome sin sentido tratando de hundir mis pasos en una grama solida y pálida.

Fue allí cuando dirigí la mirada hacia arriba y dije tan coloquial como suena “Mierda, que bello esta el cielo hoy. Se ven como un millón de estrellas”

Caminé hacía aquel lugar que he decretado es ‘mi lugar’, si, aquel lugar donde nunca hay nadie, estoy sola con mis pensamientos y tengo chance de pensar y decir lo que quiera decir. No importa si estoy en medio de una supuesta crisis momentánea o si tengo una sonrisa en la cara –como era hoy el caso- aquel es el lugar dónde voy a sincerarme con el mundo. Llegué, caminé por unos cinco minutos, solo viendo al cielo y siguiendo con la vista a esos aviones que pasaban por encima. Luego, a pesar de saber el maldito frío que hacía, me acosté en el piso. Aún cuando tenía guantes, se me congelaban los dedos… de hecho, mis veinte dedos estaban absolutamente congelados, todos y cada uno de ellos. Aún así, permanecí acostada en aquel suelo helado.

El cielo brillaba de la misma manera que lo había hecho la grama un par de minutos antes. Me eché allí a observar el cielo. A asombrarme de su perfección. A sonreír para mis adentros.

Pero, ¿Se acuerdan aquel post, dónde les dije que ya nada me podía joder, que simplemente era feliz? Bueno, recuerden que esta que está aquí, es María Magdalena. Soy fastidiosa, soy virgo –perfeccionista- y protestona por naturaleza.

Fue allí cuando miré a un lado y pensé ‘que excelente sería tener ahora a alguien con quien compartir esto’. Empecé a pensar, y en menos de medio minuto el candidato ideal, si, aquel fue elegido sin rival potencial alguno.

Fue allí cuando puse todos esos pros, y me puse a hablar para mí misma: “No sé si te gustará echarte a admirar el cielo, pero siempre has tenido cara de que sí… ojalá hubiéramos hablado de eso; Definitivamente, no serías una niñita quejona con el frio… tu siempre tienes calor, aún en una sala de cine helada; No eres el niñito sifrino quisquilloso que me diría que no se echa al piso porque se ensucia; Aun cuando no te gustase el cielo, siempre tenemos millones de cosas de que hablar. Cuanto me gustaría que estuvieras aquí aunque fuera por solo este momento…” Sí, estando allí sola, pase de una completa felicidad, a nostalgia. Pensé en cuánto te extraño… aún cuando te llevo extrañando desde antes de partir para acá. Pensé en aquel último día y pensé en aquel último abrazo. Pensé en aquella noche en la que me sentí cual en película de Disney, con mi príncipe azul al lado. Pensé en todas aquellas situaciones por las que en algún momento tu madre ha de haberse rascado el oído izquierdo. Pensé en todas las mentiras y excusas. Pensé en lo fácil que perdone todo aquello que nunca hubo razones de si quiera molestarse. Pensé en los malos ratos que pasé, en todos los momentos en que te extrañé… Pensé en todas las veces que esperaba toparme contigo, también aquellas que te veía a lo lejos y confiando en que no me hubieses visto, daba media vuelta e iba en dirección contraria… si, pensé en muchas cosas y aún así, te extrañé y deseé estuvieras echado a mi lado. Hoy decidí que te debo otro mail… pronto, lo prometo.

También ahora me doy cuenta de que debo dejar de pensarte… me doy cuenta de que debo recordar las circunstancias que nos rodean y recordarme que todo esto fue mi elección, de nadie más. Y que debo tratar de seguir en mi monotonía de sentimientos hacía ti… y eso no es una idea cualquiera, es mi objetivo.



Victoria B.

martes, noviembre 23, 2010

It’s because I miss you…

Hay momentos que te derrumban la vida.

Momentos en los que te enteras de que a ese alguien a quien amas ya no va a estar allí más nunca. Sientes el que mundo se vuelve negro, que ya no hay razones para seguir, solo quieres entrar en tu cama y llorar cual bebé con necesidad de tetero.

Y es que creo que no hay nada más doloroso que perder a alguien que quieres, no hay nada más doloroso que perder a alguien que forma parte crucial de tu vida. Tus amigos se acercan y tratan de consolarte, fallando en todos y cada uno de sus intentos. Tu familia usualmente está igual de devastada que tú.

Y tú… no eres capaz de ver al futuro, no eres capaz de ver al frente, tú solo ves al pasado, ves todo aquello que viviste y que nunca se va a repetir, ves todos aquellos errores que cometiste y nunca vas a poder solventar, ves todas aquellas risas, abrazos y conversaciones que te dieron un obvio momento de felicidad en algún momento de tu vida. Tratas de pensar en estos momentos, tratas de meterte en la situación para llenar tu corazón de aquella felicidad… siempre te sales de esa fantasía sin éxito alguno.

Después de que pierdes a ese alguien, es cuando en cada película cuando alguien se muere, por más abstracto que sea, se te aguan los ojos sin poder evitarlo. Es después de que eso pasa, que cada vez que te enteras de que un familiar de alguien que quieres también se ha ido, sientes su dolor y no puedes evitar acordarte el dolor que sentiste cuando paso lo mismo con ese alguien a quien extrañas enormemente.

La gente dice que con el tiempo uno olvida, que con el tiempo dejas de extrañarlo… no es verdad. Con el tiempo, la única diferencia, es que el dolor es menos agudo, pero jamás dejas de extrañarlo. No dejas de pensar un solo día en el… no hay un solo logro que no le dediques, sabiendo (o esperando) que si estuviera contigo estaría enormemente orgulloso de ti. No diría nada, no a ti, nunca. Le comentaría a sus amistades… y en cuanto a ti, una sonrisa y un abrazo de oso con una lengua estriada lo dirían todo.

Hay veces que te preguntas ¿Qué estaría haciendo el día de hoy si siguiera aquí? ¿Será que ya viviría con nosotros? Seguro que si… y sería demasiado feliz. ¿Qué estaría leyendo? ¿Será que se hubiera logrado arreglar los problemas oftalmológicos?

¿Por qué el ascensor no pudo llegar más rápido… o luego? ¿Por qué no se le quedo nada? ¿Por qué no se distrajo hablando con los de la pizzería? ¿Por qué no fui capaz de hablar cuando lo vi? ¿Por qué no le dije lo mucho que lo quería? ¿Por qué me bloqueé y evite escuchar los gritos de dolor en el cubículo contiguo? ¿Por qué tiene que haber gente tan malditamente bastarda en este mundo? Hay tantas preguntas que me vienen a la mente tan seguido… y que nunca logro responder, que a veces me pregunto sí será sano seguir llorando por algo que paso hace tanto y que jamás podré cambiar.

Y es allí cuando empiezo a llorar incontrolablemente, me empieza a doler la cabeza, me arden los ojos, siento el vacio en el estómago y todo el peso del mundo en mi pecho. Y es que te extraño indescriptiblemente, te extraño de manera que he llegado a desear cosas absurdas e injustas. Aún sabiendo que no vas a volver, aún sabiendo que no hay nada que yo pueda cambiar, pero yo lo deseo… lo deseo con todo lo que puedo dar de mí, como si cerrando los ojos y pensando en eso fuertemente fuera a lograr algo… cual niñita de siete años, si.

Y hoy, 23 de Noviembre, te he pensado más veces que de costumbre. Cada vez que escribí la fecha, cuando comí calamares en el almuerzo, cuando me hablaron de España, cuando hable de pescado en la cena y el momento en el que más sentí el dolor, fue cuando me dijeron que un familiar de alguien que quiero había muerto. Luego me decidí a escribir este post, cuando hable con ese alguien y los ojos se me llenaron de lagrimas, para luego inundarme la cara mientras lo escribía. 

Fue allí cuando dije que hoy, era el día adecuado para finalmente dedicarte el post que llevo rato aplazando, aunque no es ni la mitad de bueno de lo que te mereces. Ya he escrito de ti en el pasado, ya te he recordado en otras entradas… estás por doquier en mi blog, pero nunca has tenido una entrada solo tuya.

Así que aquí esta, una entrada para ti. Mi abuelito, el mejor abuelo que pude tener…
Te extraño y te recuerdo cada día.



Victoria B.






















lunes, noviembre 22, 2010

Shame on you.

No logro entender por qué te costo tanto entender que no hay ningún “we” entre nosotros… yo traté de comportarme políticamente, responderte amable pero firmemente.

Si te soy sincera, me pareciste ‘atractivo’ desde el primer momento en que te vi, no te voy a mentir. Pero luego de la primera impresión tienes que conocer mejor a las personas, ahí es cuando me di cuenta de que eras amable y buena gente, si… pero en la repartición de materia gris, llegaste tarde. Hiciste una cola muy larga para una buena apariencia y tu cerebro quedo chucuto.

Luego hubo un pequeño error, de esos que cuando los cometes se te quedan retumbando en la mente y piensas ‘Mierda, la cagué en grande…’. Pero no bastó con eso, no bastó con reparar luego ese error, no, tú tenías que venir a rematarlo todo… a tratar de llegar a algo.

Tú tenías que llegar con toda tu falsa virilidad y un aliento impregnado de alcohol y cigarro a joderlo todo un poquito más. Tú tenías que decir aquello que crees sentir -que te informo que no lo sientes. No me conoces como para sentir nada, son solo las hormonas echándote una buena vaina.-

Tú tenías que llegar y ponerte patético, para hacerme odiarte un poquito, así como odio inevitablemente a la gente patética. Tenías luego que tomar protagonismo en la noche, bañándote en alcohol, acabando con la cajetilla de Marlboro y buscando explotar tu hígado o tratando de conseguir un coma etílico. Con movimientos toscos, pisadas torcidas y oraciones vacías conseguiste que todo el mundo te viera con una indescriptible preocupación y decepción compartidas.

Y fui allí, cuando el cuarto quedó vacio, que después de más movimientos toscos, idiomas mezclados y alcohol inundando tu cerebro de poca habilidad, fue allí cuando los gritos se volvieron tu idioma, gritabas e insultabas, lanzabas improperios mezclando dos idiomas, hacía mí, hacía ti y hacía el mundo en general.

Yo helada, me alejé. Solo me alejé de ti y de tus gritos y de cualquier otra cosa que pudieras decir. Lo que me impresiona hoy es que eres tú el que me ve con desprecio, eres tú el que actúa como si nunca hubiese entrado a la habitación.

No te diré que no me molesta. Prefiero no tener esa clase de intensidades en mi vida. El problema aquí, es que habrá que convivir de una forma u otra, y aunque sea con monosílabos habrá que comunicarnos ocasionalmente.

Así que agarra toda esa mierda con la que cargas en el lomo y deja de comportarte como un bebé, que ya esa etapa la superaste hace mucho tiempo.




Victoria B.

domingo, noviembre 21, 2010

#BIGFAIL

En estos días estaba hablando con un muchacho de Kuwait, se estaba quejando de que aquí había muchos árabes. Le dije que si... que seguro el inglés era importante para ellos y conseguir trabajo y tal... Que es que los árabes quieren superar a los chinos y conquistar el mundo...



No sabía que la gente de Kuwait era 'árabe', digase mismas creencias y mismo idioma, si...


Victoria B.

miércoles, noviembre 17, 2010

Un Violinsta En tu Tejado.



Hace menos de dos meses, escuche por primera vez esta canción y la tenía demasiado pegada, además, me sentía muy identificada con ella.
No es el tipo de música que suelo escuchar, y con eso me refiero a que no soy ‘big fan’ de Melendi, pero admito que hay varias de sus canciones que de verdad me gustan… y esta es una de ellas.
Hoy todavía la tengo pegada, hay momentos en que solo porque me encanta la pongo a que se repita una y otra y otra y otra vez. Me parece muy genial, es por eso que la comparto con ustedes:

Y aquí les dejo la letra en caso de que la quieran... porque parte de la magia de esta canción es precisamente la letra:
Era tan dura
Como la piedra de mi mechero
Me asaltan dudas
De si te quiero
Eres tan fría hay como el agua
que baja libre de la montaña.

Y no lo entiendo
Fue tan efímero
el caminar de tu dedo en mi espalda dibujando un corazón
Y pido al cielo que sepa comprender
Estos ataques de celos
Que me entran si yo no te vuelvo a ver.

Le pido a la luna
Que alumbre tu vida
La mía hace ya tiempo que yace encendida.
Con lo que me cuesta
Querer sólo al rato
Mejor no te quiero será más barato
Cansado de ser el triste violinista que está en tu tejado.
Tocando pa’ el inglés siempre desafinado.

Eres tan tenue
Como la luz que alumbra mi vida
La más madura fruta prohibida
Tan diferente
Y parecida
A la tormenta que se llevó mi vida

Y no lo entiendo
Fue tan efímero
el caminar de tu dedo en mi espalda dibujando un corazón
Y pido al cielo que sepa comprender
Estos ataques de celos
Que me entran si yo no te vuelvo a ver.

Le pido a la luna
Que alumbre tu vida
La mía hace ya tiempo que yace encendida.
Con lo que me cuesta
Querer sólo al rato
Mejor no te quiero será más barato
Cansado de ser el triste violinista que está en tu tejado.
Tocando pa’ el inglés siempre desafinado. (bis)y..

Mientras rebusco en tu basura
Van creciendo los enanos
De este circo que un día montamos
Pero que no quepa duda
Muy pronto estaré liberado
Porque el tiempo todo lo cura
Porque un clavo saca otro clavo
Siempre desafinado y...
Mientras rebusco en tu basura
van creciendo los enanos
de este circo que un día montamos.
Victoria B.

And now... What?

¿En qué nos hemos convertido?
Ya no me sorprendo pensando en ti y pensando en aquello que quisimos pero nunca llegamos a ser. Hoy me veo sonriendo frente a un monitor, a millones de kilómetros de distancia de ti, hablando contigo de lo que hice, de lo que no quise hacer, de lo que pienso y lo que quiero. Tú me hablas de ti, de lo que haces, de lo que te preocupa, de lo que quieres, de lo que vives… Hay un en él y de una ella, hablamos de nosotros y de ellos.
¿Cuándo te convertiste en mi amigo? ¿Acaso de verdad eso es lo que quiero? Aun no puedo decirte si quiero que seas mi amigo. Te digo que siempre recordaré el cosquilleo que me hacías sentir. Te digo que siempre me pondré roja como un tomate cuando te vea. Puedo asegurar que la velocidad de mi corazón siempre irá en un continuo vaivén cuando esté contigo (se detiene y luego empieza a correr de la emoción… si, la adrenalina siempre ha sabido cómo jugar conmigo).
Creo que lo más sano para estos nueve meses es que seas mi amigo… no te quiero perder, no quiero que te conviertas en un desconocido, no quiero borrar ni un solo segundo que pase contigo ni quiero evitar una sola de las sonrisas que me sacas inesperadamente, no… no quiero perder eso.
Por eso es que aunque este lazo de amistad que nos está uniendo ahora sea demasiado raro para mi… en cierta forma es lo más seguro por el momento.
Es seguro porque sé que cuando vuelva vas a seguir ahí. Voy a saber en quién te has convertido y tú sabrás en quién me he convertido yo. Sabremos con quién vamos a tratar, sabremos si aun nos seguimos llevando igual de bien y si hemos evolucionado en caminos parecidos o por el contrario vamos en direcciones completamente opuestas.
Además todo esto a veces resulta agobiante. Te hablo, te conozco, te entiendo… pero no te veo. Van solo tres semanas desde que me fui, y hemos hablado más ahora que antes. Y ya extraño tu aroma, tus rasgos tan sutiles y pero masculinos, tu sonrisa, tu cabello cayendo sobre tu frente…y sobre todo, extraño el sonido de tu risa, eso es algo que siempre me encantó. Eufórica, enérgica, siempre llena de carisma y alegría… la extraño aun cuando muchas de las veces que la escuchaba estabas riéndote de mí y no conmigo, pero al final siempre terminaba acompañándote riéndome de mi misma.
Al final del día, te has convertido en un amigo… en un buen amigo. Y ¡Que susto me da eso!. Que sensación más extraña de sentirme en esta línea in between… si, de quererte como algo más y de tenerte como mi amigo. Solo espero tu entiendas mejor la situación en la que estamos… aunque conociéndote, no debes pararte a pensar acerca de eso, tu solo dejas que la vida fluya naturalmente.
Por eso es que siempre me encantaste… a pesar de que analizas absolutamente todo, nunca dejas que un pensamiento de algo que no puedes controlar te mine la mente… Espero algún día me enseñes a ser así.

Victoria B.

lunes, noviembre 15, 2010

Mi blog y Yo.

Me acabo de dar cuenta de que esto, este espacio, todas estas líneas, es decir: Mi Blog.


Se han convertido en una de las cosas más importantes para mí. Aquí plasmo todo lo que siento, aun cuando solo yo pueda entender de qué estoy hablando. No me importa. Aun puedo leer mis primeras entradas por allá a finales de agosto y sé en que estaba pensando cuando lo escribí, sé como me sentía, sé cuales eran los mensajes ocultos entre cada oración y lo sé todo porque esa soy yo.

Todas estas líneas, representan a mi persona, representan quien soy hoy, lo que fui y lo que quiero ser. Mi blog se ha convertido en el mayor conocedor de Victoria Bethencourt, also, las personas que me han leído con periodicidad, me conocen hasta mejor que muchos de mis amigos.

Mi blog es como ese mejor amigo que siempre me escucha y a quien no tienes que decirle todo porque lee el resto de la historia de entre tus ojos. El amigo que me ha acompañado cuando con lágrimas en los ojos descargo mis temores. El amigo que ha soportado insultos y malas palabras en aquellos momentos en los que el asesinato parece ser la salida más conveniente. Si, Black, White and Red se ha llenado de *Red* por todos lados, me da dado tantas oportunidades como he necesitado de demostrar lo grandioso o arrollador que puede ser el mundo.

Hoy me siento frente a mi computadora, con un clima helado afuera y un cuarto no tan caliente por un par de problemas con la calefacción, y puedo decir que a pesar de que a veces me da miedo plasmar todo lo que estoy sintiendo, a pesar de que las metáforas han tenido que colmar este espacio, a pesar de que a veces todo un día o toda una situación a veces los tengo que resumir en una palabra… a pesar de todo eso, estos últimos tres meses siento que he evolucionado como persona junto a mi blog.

Es decir, antes, cuando una situación era demasiado devastadora, abría un documento de Word y empezaba a escribir todo lo que estaba sintiendo; Hoy, en cambio, sea bueno, malo, indiferente o simplemente ficción: abro mi blog y empiezo a drenar un cerebro lleno de ideas… algunas un tanto inútiles, pero al fin, mías.

Se han de estar preguntando ¿Por qué carajo estás escribiendo algo así en un momento tan esporádico? Y les voy a responder, que me acabo de hacer la misma pregunta. No lo sé… solo sé que comente “tu blog es mejor que un mejor amigo” y decidí escribirle algo a mi amado amigo, mi blog.

 
Victoria B.

Thinking V

Honestamente, no sé si resolví algo o no.
Pero sí sé que no me amargare más por algo que no puedo cambiar.
Lets move on.

Victoria B.

5 degrees as best friend.

En Caracas, 23 grados ya eran motivo de bufanda, e incluso a 30 grados me las ponía ‘porque se ve bien’.
En Caracas cualquier frío me llegaba a los huesos, me helada y me dejaba petrificada en una silla tratando de tomar calor.
Hoy el frío es mi mejor amigo.
5 grados han sido el acompañante de mí día, y este ha sido uno de los días que más que pasado afuera.
El frío me hace pensar con coherencia. El frío me acompaña en mis caminatas.
Un vapor blanquecino se escapa de mi boca con cara suspiro.
Charcos, grama húmeda, moho, hojas en los zapatos y barro que recubre ambas suelas, ruedos emparamados, manos en los bolsillos, peinados asesinados por la humedad; eso y otras cosas han protagonizado mi día.
Y es que no me importa, yo salgo y despejo mi mente con el frio que cala mi pituitaria.
Creo que mas que ‘pensar’ estoy buscando todo lo contrario, simplemente llenar mi cabeza con trivialidades.
Prefiero ver el paisaje que está a mi lado, prefiero recordar que estoy aquí haciendo aquello que he querido hacer durante tanto tiempo y prefiero no dejarme sabotear por mí misma.
Si, no puedo seguir permitiéndome arruinarme los momentos, me cago en todo, arreglaré esto como pueda y me seguiré tripeando mi vida… Punto.
Y eso lo pensé mientras jugaba con mi aliento en el frío, mientras pensaba con la claridad necesaria viendo la luna y la neblina que recubría el suelo.


Victoria B.

domingo, noviembre 14, 2010

Thinking IV

Hola Murphy.
Bien Venido nuevamente, no te extrañe.
¿Cuándo agarrarás vacaciones de nuevo?


Victoria B.

Thinking III

Yeah, I’ve become the one who I usually insult. Wonderful, I’m a genius.
Fuck.

Victoria B.

No dejo de sorprenderme a mí misma. Fuck.

Yo que llevo años soñando con magia y alegría, un corazón acelerado y timidez.
Yo que no logro recordar la última vez que solo él lograba entrar en mi mente para adueñarse de mis sentimientos. Y ahora que lo pienso, a pesar de mi martirio, aquello era muy sencillo de afrontar.
Ya van un par de años desde aquel momento en que decidí seguir con mi camino y esperar a que el viento borrase las huellas de todos aquellos sueños e ilusiones rotas.

Hoy siento como mi Titanic choca con un iceberg y se hunde lentamente, mucho mas lento que el original. Dejándome pensar, lamentarme y culparme por haber sido una capitana negligente y haberme ido a dormir.
Pero yo también me hundiré con mi barco. Y es que yo no tengo la opción de montarme en un bote salvavidas, yo no tengo la opción de salvarme, yo no tengo opciones. Yo solo tengo que hundirme con mi Titanic y aprender a vivir en aquellas profundidades... hasta que alguien logre rescatarme, hasta que alguien logre llevarme nuevamente a la superficie y sacarme de estas aguas heladas y punzantes para montarme en un nuevo camarote con calefacción.

Lo siento, de verdad lo siento. Eso es lo que me he repetido mil y una veces últimamente. Es increíble lo buena que soy arruinándome los momentos, es increíble lo buena que soy boicoteándome a mi misma...

Por eso es que yo digo que soy Masoquista.



Victoria B.



miércoles, noviembre 10, 2010

Thinking II

Mi mente me traiciona asquerosamente, esta llena de pensamientos cursis... como Repollo con Lazo.

How can I change this? This is not me... Still, I love it.



Victoria B.

domingo, noviembre 07, 2010

Thinking I

Como siempre digo: Yo debí haber sido hombre.
Los hombres son mucho menos complicados.
Las mujeres somos insoportablemente necias.

Victoria B.

Por fin, he aquí la primera parte de mi viaje y mi nueva vida.


Este es el lago que está al lado de mi college
 Fue en el Aeropuerto cuando me percaté de que me estaba yendo por nueve meses completos, y nueve meses en los que no vería a mucha gente que adoro. Fue cuando abracé a mi prima cuando sentí un nudo en la garganta. Ya se que soy yo la primera que dice siempre que las redes sociales nos mantienen fácilmente en contacto, pero aun así, también soy yo la que sabe que nunca es lo mismo. De todas maneras, cuando crucé la puerta a inmigración todavía sentía un nudo en la garganta.


Pasamos todas las revisiones de inmigración y fuimos a nuestra gate (12, si mal no recuerdo) de salida para esperar, mi avión iba repleto de árabes con vestimentas típicas y de asiáticos. Creo que ese fue el comienzo de todo lo ahora en Bedgebury.

Fue un avión nocturno de unas 8-9 horas en el que pude dormir alrededor de unas 4 quizás. Llegar a Frankfurt, al “Frankport” fue como darme la mejor bienvenida al viejo mundo. A penas bajamos del avión (que no se acerco a los edificios en verdad) hacía un frio aterrador, mis manos se helado en cuestión de segundos y esferas de humo salían de mi boca. Bajando las escaleras había alrededor de cuatro enormes autobuses esperando por todos los pasajeros para llevarnos a los edificios de desembarque. Todo estaba en un total y perfecto orden. Todos y cada uno de los movimientos que cualquier maquinaria pudiese realizar estaba señalado con rayas en el piso, y lo que impresiona, todos y cada uno de los conductores cumplían el camino que indicaban las rayas aun cuando ‘si me como este trozo llego más rápido’, si, el orden era total, se sentía ese aroma de ‘primer mundo’ en el aire helado que había derrotado también a mis orejas.

El aeropuerto era tan inmenso, bello y ordenado que no podía creerlo. Después de llegar, entrar para hacer la transferencia y que nos chequearan todo empezamos a caminar en dirección hacia nuestra gate (esta vez era la 26), mientras íbamos en camino, en la 23 habían un par de cabinas totalmente herméticas con puertas automáticas que era exclusivamente para que todos los adictos a sus cochinos cigarros entraran a fumar, por supuesto mi mama NECESITABA entrar, así que mientras ella saciaba el vicio yo me fui a la parte trasera de esas cabinas, que tenía unas 4 hileras de 10 sillas de relax, eran unas sillas de cuero que demostraban que desde la primera hasta la última línea de diseño estaba pensada en comodidad y confort para una buena siesta. Esto fue lo que hice, tome mi libro y empecé a leer hasta que el sueño finalmente me derroto, pase al menos hora y media de mi estadía , de tres horas en el aeropuerto de Frankfurt, durmiendo. Por fin pude dormir cómodamente, la necesidad de un sueño reparador era desesperante.

Ya se acercaba la partida a nuestro próximo vuelo que sería de una hora hasta Londres, fuimos a nuestra gate, entramos al avión y en este caso desde antes de si quiera despegar, desde antes de si quiera tener tiempo de tener miedo al despegue caí rendida cual bebe de tres meses, me desperté cuando escuche los movimientos de los carritos por los pasillos, me desperté a comer y tomar algo para luego seguir durmiendo como dios manda.

Finalmente llegamos a Londres, recogimos las maletas y decidimos ir en metro hasta nuestro hotel que estaba a una cuadra de una estación de metro de la misma línea que salía del aeropuerto (Picadilly Line).

Henos ahí, dos mujeres con tres enormes y pesadas maletas encima. Yo llevaba las dos mías y mi mama la suya. Escaleras mecánicas, necesitaba un modus operandi… no lo tenía, menos mal un muchacho me vio en esta situación de apuros y me ayudo sosteniendo una de las maletas hasta abajo donde me la entrego de nuevo.

Bien, finalmente llega el vagón de metro, en seguida noto que tiene un pequeño escalón para subir, buenísimo, de nuevo me tuvieron que ayudar con una de las maletas, menos mal esos vagones tienen un área designada única y exclusivamente para luggage, yo me quedé parada apoyada en mis maletas ‘cuidandolas’, fueron unos cuarenta y cinco minutos de trayecto hasta Russel Square, bajamos del vagón, seguimos los carteles de salida y nos encontramos con unas enormes escaleras empinadas frente a nosotras, yo me hice a un lado y me quedé abajo esperando a que todo el mundo terminara de pasar para empezar a luchar con mis 48 kilos de equipaje. Mi madre, en cambio, decidió que ella era WonderWoman, así que empezó a subir la escalera. Al segundo escalón un muchacho la vio y le ofreció subirla por ella. Frente a mí otros muchachos se detuvieron y me ofrecieron ayuda nuevamente, me comporte como la típica mujer estúpida que deja que le hagan todo y les dije que si, uno subió una de las maletas y la otra la subieron entre otros dos (ya imaginarán el peso).

Al llegar arriba un montón de gente congregada, era la cola para subir al ascensor que te llevaba a la superficie. Si querías usar escaleras (que en teoría eran solo para emergencias) te advertían que eran 175 escalones, obviamente preferimos esperar el ascensor y esperar a que fuera nuestro turno.

Al salir yo fui a buscar hacia donde estaba el hotel, no me tomo mucho tiempo encontrarlo pero empecé a caminar por los alrededores para ver que tal era todo mientras mi mama fumaba fuera de la estación vigilando las tres maletas. Luego fuimos al hotel, al llegar al hotel, nos atiende una muchacha que no logré descifrar a que actriz de la televisión se me parecía, pero podría jurar que la había visto de antes. Bueno, esta muchacha que me resultaba tan conocida, nos dice que no tenemos ninguna reservación en el hotel, que ellos están full hace unas 3 semanas y que no tenemos booking, llamó a su supervisora quien empezó a hablar con la gente con la que habíamos conseguido el hotel, luego se los pasó a mi mama, y aun así luego dijeron que no sabían de ningún otro lugar donde nos podíamos quedar, se lavaron las manos con eso y nos quedamos en la calle.

En lo que veo que ya no vamos a tener habitación alguna en ese hotel le pregunto a la encargada, quien era mucho más agradable que la muchacha que ya había visto, si sabía de algún otro hotel cerca, me dice que sí, pero que no sabe si tendrán puesto, pues estamos en holidays. Ahí es cuando le aclaro que si sabrá de algún hotel que quede cerca, no sea tan caro y aun pueda tener habitaciones. Llamó a uno le pidió a mi mama su nombre y al trancar nos dijo que había conseguido uno a dos cuadras que tenía habitaciones pero hasta el viernes, el sábado estaba full. Nos fuimos para allá y ahora sí, ¡teníamos hotel!

Bueno primer día en Londres, pura caminata (lo cual en verdad no es muy diferente a los demás días). Pero sí, fueron tres días de caminetear Lodres, ver tiendas, ver lugares históricos y toda esa cuestión que uno siempre hace cuando está de vacaciones.

Nos montamos en unos botes que te llevaban a lo largo del Támesis con un señor de esos que cobran por hacer chistes tan malos que a veces dan risa y que se supone no debería hacer más que dártela historia de lo que estás viendo, ah, un Guia, sí, eso. Y bueno, en ese viaje llegamos hasta London Tower. No sé si ya lo escribí pero cuando hablo en plural me refiero a mi mamá y a mí.

En fin, el viernes por la noche fuimos a un café a agarrar internet, reservamos el avión de mi mamá para España y el Hotel en Tunbirdge Wells (el pueblito que está cerca de donde me estoy quedando).

Sábado por la mañana, terminar de hacer las maletas que habíamos desordenado y partir a la estación de trenes de London Bridge que es la única que nos llevaba hasta Tunbridge Wells -esta vez optamos por tomar un taxi-. Llegamos, compramos los tickets, de nuevo arreando con tres maletas por toda la estación. Hasta que finalmente llegamos al andén dónde teníamos que esperar, no tardo mucho en llegar el tren, lo abordamos y los próximos cuarenta y cinco minutos fueron montadas en el tren. Llegamos a Tunbridge Wells y TARÁN, a pesar de que yo había guardado en foto de la pantalla el número de booking del hotel, no salía el nombre del hotel, cosa que ninguna de las dos era capaz de recordar.

Agarre mi computadora y empecé a recorrer todo el pueblo en busca de algún pub que dijera u ofreciera internet: NADA. Al final decidimos ir al único hotel del que teníamos el nombre, llegamos a algo llamado Royal Wells o algo así, nada que ver… ahí no era, pedí para usar su internet para volver a la pagina del booking. Mi computadora no agarraba el wifi #noséyoporqué así que después de unos quince minutos tratando, la señora que atendía ahí de lo más amable me ofreció usar si computadora.

En cuando abro del hotel, ella muestra una clara expresión de “WTF?”. Me dice que ella no lo conocía, busco en una guía de hoteles de Tunbridge, no salía allí. Me dice que la dirección que me están dando es de otro pueblo, Lamberhust creo que se llamaba, que según ella estaba unos 45 minutos de allí. Nosotras vimos que en el mapa no señalaban el hotel tan lejos, así que le pedí el número de la línea de taxis y llamamos para que nos vinieran a buscar.

Llego una señora mayorcita, de unos 65 años, ella era nuestra taxista. Tampoco sabía que hotel era, le dimos la dirección y nos advirtió que era lejísimos y nos aseguró que lo que salía en el mapa no podía ser, porque de hecho, pasamos por ahí, y hay había otro hotel en cambio.

Cuando íbamos a mitad de camino tomamos una decisión, le dijimos a la señora que se regresara a Tunbridge Wells, que eso estaba muy lejos, que queríamos ver el pueblo, que el día siguiente teníamos que ir hasta Bedgebury y que eso era el fin del mundo. Le pedimos que nos llevara a un hotel, no tan caro, en donde ella creyese que aun podía haber habitaciones.

Nos llevó a un hotel del cual no soy capaz de recordar el nombre. La señora era demasiado amable y buena gente, se bajó ella misma a preguntar si habían habitaciones y regresó al carro diciéndonos que si tenían. Bajamos las tres maletas del carro y las subimos por las escaleritas del hotel. Mi mamá fue a pagar la habitación y demás. Al terminar, nuestra habitación estaba en el primer piso. Parám, no hay ascensor. Había que subir las tres maletas de veinte tantos kilos cada una por las escaleras… Ya se imaginarán la faena.

Esa tarde salimos a pasear por el pueblo, comimos en un restaurant EXCELENTE por primera vez en todas las vacaciones, salimos de restaurant a eso de las 5.30-6pm, ya era de noche y ese día, un sábado a esa hora ya absolutamente TODO, menos los lugares de comida, estaba cerrado. Increíble lo temprano que cierra todo en ese pueblo.

El día siguiente partimos a Bedgebury, ok, agarramos un taxi... A mí me dolió pagar ese pastón por un taxi, fueron 44 libras en total, mi mamá tuvo que pagarle al taxista con tarjeta de crédito porque jamás pensamos que fuera tanto y no cargábamos con tanto efectivo. [Para que tengas una idea: una comida normal con bebida y todo, te puede costar 7 libras. Un disco está entre 4 y lo máximo que he visto son 15 libras, alguna camisa te puede costar 30libras, un par de botas te pude costar 85 libras como te pueden costar 300-400libras (si, aquí nada tiene que ver una vaina con la otra) y más o menos así son los precios. Y cada libra es 15mil bs. ;). Si, ese taxi costo demasiado en bolívares, no me he atrevido a hacer la conversión, prefiero no saberlo]

Llegamos a Bedgebury, el lugar es fenomenal, hermoso, otoño... mi estación favorita. Un bosque rodea toda la zona de los edificios, ningún edificio tiene pinta modernosa, todo va acorde con el main building que es un inmenso y bello castillo.

Llegamos y solo habían un chino y como tres o cuatro chinas abajo, ellos me abrieron la puerta y me llamaron a Dolly (la encargada de todas las cosas en mi casa) Me recibió me explico un par de cosas, me llevo a mi cuarto, (thank god mohamed, un árabe que vivió en la casa hasta ese día, en verdad, se había ofrecido a subir mis maletas, porque no quería seguir arreándolas y era en el segundo piso), me dio un paseo para que conociera lo esencial y bueno, después nos dejo para que paseáramos un poco o para que fuéramos a desempacar, eso fue lo que hice, desempaque todo hasta que fue la hora de ir a almorzar (Dolly le había pedido a mi mama que se quedara hasta el almuerzo) comimos y dimos un paseíto, camineteamos por el lago, que es MAS bosque aun, es decir, más bello aun, jajajajja. Y bueno, vimos más o menos todo por ahí. A las dos ya salía el autobús que bajaba a todo el mundo a Tunbridge Wells, bajé con mi mamá para acompañarla hasta a estación y despedirme de ella.

Después de eso subí (si, es colina) hasta el centro comercial donde habían dejado a todos los demás muchachos que habían viajado también en el autobús. No es un centro comercial muy grande y tiene una arquitectura bastante rara, no importa por qué puerta de cuál de los dos pisos salgas, SIEMPRE, sales a la calle (y en esta parte no hay casi colinas) weird... yeah..

Bueno lo medio camine todo, entre solo a HMV (la tienda de música <3) y me fui a donde se tenía que esperar el autobús. Ahí hice mi primer amiguito, un iraní del cual no he sido capaz de aprenderme el nombre, pero que es muy pana... Es el iraní, punto.

Fui en el autobús de regreso a la casa y cuando llegue, a pesar de que tenía ganas de irme a mi cuarto a estar sola, me obligue a bajar al common room así fuera con mi computadora para no ser tan asocial... Igual, a pesar de que los árabes están hablando a cada rato en árabe y no les entiendes nada, es divertido estar ahí, es donde paso casi todo el tiempo en verdad.

Ahí conocí a mi segundo amiguito que al preguntarme de donde era me dice "¡¿Venezuela?!" y yo como... "-.-' si, south america" y él, "Si, yo se, yo también soy venezolano jajajaj" jajajajjajajaja, si, fue cómico.

Y bueno al final de esa noche, al menos de solo presentarme ya había conocido a casi todos...

El lunes me hicieron mi examen a ver en qué nivel quedaba, quede en el mismo salón que el venezolano, donde veo clases además con una muchacha de Hong Kong, uno de Angola, un japonés que está loco y dos brasileras.

Es cómico como a los profesores de hecho si se les llama como lo que uno ve en las películas, dígase Miss. Gomita tal o Mr. Papita.

Esa tarde tenia Ciencias, ese lunes y el próximo vamos a estar viendo chemistry, luego cambia a biology o fisics... Yo que pensé que me había salvado de ver más nunca estas bromas... pues no.

Ese lunes hicieron una reunion que al parecer hacen TODOS los lunes que es como para ver como está yendo todo y blah blah blah.. Dolly pregunto si ya conocían a la nueva estudiante (sí, yo) y todos respondieron en coro enérgicamente que si... fue bonito saber que no era un fantasma y que no les caía mal aun, si... tenía miedo de eso de no encajar en lo absoluto.

Bueno de resto he estado viendo clases, todas las mañanas ingles. Y luego:

Martes: Mathematics.

Miércoles: Business <3.

Jueves: Humanities <3 (este jueves pasado vi politics, igual que el próximo... luego cambia anoséque)

Viernes: Libre.



Bueno, la comida... la comida no es tan buena en verdad. Es normal.

Depende mucho del día a decir y depende de lo que escojas.. Siempre tienes para escoger entre Chicken, pork, fish y vegetarian (todos los días lo hacen de una forma diferente pues) a veces hay lamb y algunas otras cosas. Depende del menú del día y acompañantes ya escoges tí, que también hay mucho donde escoger, lo cual no significa que sean muy buenos.

La cosa es que he tenido que dejar el plato de lo mal que ha estado... El jueves me quedé sin cenar por eso. A veces la comida es tan mala que prefiero la del comedor de la central, que termina no siendo tan malo, la verdad.

Veo clases de math con un profesor que también está loco e` bolas. Es medio filosofo frustrado... y puso como tres veces en la clase la canción ‘mamma hold my hand’ de aloe blacc insistiendo que cada vez que la escuchaba le daban ganas de llorar.

Y la profesora de politics, también esta frita, hace imitaciones en clase, y grita y cosas (nos estaba dando como una pequeña clase de historia de England) e imitaba lo que habían hecho y dicho las personas con voces y demás. Pero es demasiado cómica, me cayó bien, emana buenas energías la mujer.

El viernes aquí se celebró algo de que al rey James I lo trataron de matar y la policía lo detuvo, así que celebran que la policía hizo su trabajo (weird), anyway, hubo una 'parrillada' en la tarde/noche para TODO el mundo, es decir, todos los alumnos y todo el personal con sus respectivas familias.

Después había una GRAN fogata que me doblaba en altura y luego como quince minutos de fuegos artificiales, eso me encanto... me lo disfrute demasiado y no pude evitar recordar lo mucho que él disfrutaba los fuegos artificiales todos los año nuevo, se me formó un nudo en la garganta pero aun así no estaba triste, los disfruté por él.

Mi única amiga niña, ya se fue ayer sábado, que era su ultimo día... Era una rusa súper amigable y loca. Aunque la segunda oración que me dijo fue "I really love your president". Al principio pensé que me estaba echando broma y tal, le dije que si estaba siendo sarcástica... pero NO, era en serio. Luego entendí que Chávez les da de comer... Le dije que tenía que vivir ahí para opinar de eso, le sonreí y me fui para no golpearla.

Hay un alemán que es demasiado cómico, es demasiado egocéntrico. Esta un español que también fue uno de mis primero amiguitos, las tres chinas y un chino niño. Una muchacha que no se si es de Turquía o de dónde, pero siento que le caigo mal, siempre me lanza miradas como de mal humor, aun así, no creo que me cayese bien, o quizás si, quien sabe. Igual no ando nunca con ella.

Están los 15 árabes que siempre están hablando en árabe y dos señores italianos que son de lo más agradables. Y bueno, pues sí, de resto no recuerdo quien mas está en la casa, pero casi todos son árabes de los cuales solo me sé un par de nombres.

El paseo a Cambridge no lo contare ahora, pero luego les echaré los cuentos.

P.D.: Cuando la conexión sea un poco mejor subiré un post con las mejores fotos... Se las debo.

Yo confieso.




Qué extraño las mariposas revoloteando en mi estómago. Pero a pesar de ello considero que es una de las mejores cosas que me pueden pasar.

Tú me producías esa divertida sensación cuando me hablabas, me mirabas o me rozabas. Ahora ya no soy capaz de sentirla, ni contigo ni con nadie.

Debería agradecerlo… Porque esas mariposas revoloteando en mi panza lo único que dejaron al final fue soledad y dolor.

Sí, agradezco ya no ser capaz de sentirlas, ni si quiera cuando hablo contigo, ni cuando me sacas una risa inesperada por algún comentario loco característico de tú persona.

Y es que recuerdo que tu me llenaste de mariposas en el estomago desde el primer día que te ví. Fue ilusión a primera vista...

Victoria B.

In the right place.

La crítica a mí misma, como siempre, aumenta.

El esfuerzo que hago por superarme se duplica.

Mi oído se va acostumbrando a todos los acentos, a escuchar las cosas fuera de mi lengua materna y entenderlo.

Mi necesidad de hablar y expresarme es cada vez mayor, pero por alguna razón a veces las cosas no fluyen por mis cuerdas vocales como aquello que está en mi mente. Me frustro.

Acentos ajenos al mío que se me pegan, modismos extravagantes que me resultan grandiosos.

Palabras en idiomas absolutamente desconocidos que me van enseñando.

Una semana, eso es lo que llevo aquí.

Y me siento como en casa, siento conocer a algunas de estas personas lo suficiente para decir que en verdad son buena gente, con otros he cruzado suficientes oraciones como para afirmar que no me agradan.

Aun así el sentimiento de que pertenezco a este lugar es increíble.

La felicidad recorre mis venas, se cola entre mis huesos e invade mi cerebro.

Esta se ha sido una de las mejores semanas de mi vida.

Soy yo misma, aquí nadie me conocía y llegué y me comporté como quien siempre he sido.

Sin tratar de complacer a nadie ni diciendo lo que se que esperan que diga.

No me importa si piensan que estoy loca, que soy asocial, antipática o simplemente una desgraciada.

Llegué y me comporté como quién soy, respondo como me place responder y exijo lo que quiero exigir.

La parte divertida aquí, es puedo hablar con propiedad cuando digo que al menos algunos de ellos no piensan que soy esa desgraciada, aceptan mi forma de ser y no me critican.

No sé si es porque estoy fascinada. No sé si es porque estoy idealizando aquello con lo que venía soñando desde hace ya un buen tiempo, no lo sé.

Pero yo siento que este es el lugar que estaba destinado para mí en este momento de mi vida.

Y mira que yo no creo en el Destino…

 


Victoria B.

martes, noviembre 02, 2010

Not getting it?

Hay algunas cosas que no podemos explicar, cosas que no podemos entender y peor aún, hay cosas que simplemente no queremos asumir.


Hay ocasiones en las que la gente se comporta de una manera lo suficientemente extraña como para dejarte con la más clara expresión de WTF?! en la cara…

Aun así, creo que seguir adelante y no cuestionarse nada, tratar de no prestar atención a nada y no dejarse abrumar, esa, creo esta siendo la mejor solución para mí.

Antes de salir de Caracas tenía demasiadas cosas en mi mente, demasiadas confusiones y demasiadas cosas que daban vueltas en mi cabeza sin llegar a ninguna conclusión, solo daban vueltas y vueltas atormentándome y robándome horas de sueño.

Ahora estoy aquí en Inglaterra y me he dejado llevar por la lejanía. No he dejado que algunos comentarios, historias y conversaciones normalmente me dejarían atónita, ahora no les permito me atormenten de ninguna manera, estoy dejando todo pasar, me digo a mi misma que ninguna cosa que pase o que me digan ahorita puede cambiar nada, y es que simplemente, esa es la realidad… estoy aquí lejos de mi país y lejos de toda la gente que conozco, así que este es un nuevo comienzo, sé que suena a que estoy tratando de convencerme a mi misma de que ‘no importa’. Pero de verdad estoy tomando las cosas con mucha más calma y no he dejado que nada me lleve a estos extremos de desesperación a los que solía llegar, sé que no llevo más que Una semana fuera de Venezuela y que no puedo decretar nada, pero espero que todo siga así de tranquilo dentro de mi mente… espero que esa Victoria ansiosa e insoportable se quede enterrada por muchísimo tiempo en algún archivo remoto de mi cerebro.


Les adelanto que mis próximos posts serán acerca de todas las vivencias que he tenido, sé que lo he dicho muchísimas veces, ya lo sé, pero es en serio jajajaja.


Victoria B.